#MiércolesDeSeguimiento
Bogotá tiene a Medusa, una perrita valiente que ha superado tiempos difíciles y ahora sueña con encontrar un hogar donde pueda ser la guardiana fiel de una familia amorosa.
Su historia comenzó en 2021, cuando fue rescatada de una vida de maltrato y abandono. Durante mucho tiempo estuvo atada a una cadena de metro y medio en un lote lleno de escombros en la localidad de Antonio Nariño. Sin poder moverse con libertad, pasó hambre, frío y muchas dificultades. Pero Medusa es una guerrera y, a pesar de todo, nunca perdió su espíritu.
Hoy, con nueve años, es una perrita amorosa, juguetona y, hay que decirlo, muy comelona. Aunque ha demostrado ser fuerte y resiliente, prefiere ser la única consentida en casa, pues le encanta recibir toda la atención y el cariño solo para ella. Su pelaje bicolor, café con blanco, brilla con orgullo, y aunque le faltan algunos dientecitos, su sonrisa sigue intacta. Cuando llegó, estaba en bajo peso y con heridas en sus patitas, pero gracias a los cuidados recibidos, logró recuperarse y ahora espera una segunda oportunidad.
Su mayor sueño es encontrar una familia donde pueda correr, jugar y dormir en una camita cómoda, dejando atrás las sombras de su pasado.
Medusa está lista para llenar de patitas y besos el hogar que la elija.
¡Adoptarla es darle la oportunidad de ser la guardiana incondicional de una familia que la ame para siempre!