La población de animales de compañía sigue creciendo en nuestra ciudad y cada vez hay más formas de delitos, que involucran a los animales, las cuales debemos conocer.
Esos delitos crecen a una gran velocidad y afectan a esos seres amorosos y bellos que nos acompañan en nuestro camino de la vida.
Aquí planteo siete modalidades que ocupan un espacio importante en nuestra convivencia y seguridad.
1. Venta de animales y estafa:
Aunque personalmente estoy en contra de la venta de animales y apoyo la adopción, es importante anotar que ésta es una actividad todavía legal, en la cual podemos exponernos a una de las estafas más comunes que enfrentan los compradores:
Algunos locales de venta de animales promocionan de forma engañosa cachorros de raza, que en la realidad no son “puros”, vendiendo por millones de pesos “tasitas de té”, “dóberman” “pomeranian” e incluso razas extrañas como “bloodhound” o “gran Perineo” presuntamente “importados”.
Una vez estos animales crecen y las personas se encariñan con ellos, comienzan a evidenciar que el animal no era “puro” y que todo fue una estafa, situación que conduce, en muchos casos, a maltrato y/o abandono.
Igualmente se han detectado casos en los que el comprador da un primer pago para “apartar” el animal o incluso la totalidad del mismo a un supuesto vendedor que desaparece con el dinero sin cumplir con lo pactado. ¡¡Que esto sea un incentivo para que paren de comprar y mejor adopten!!
2. Robo de animales
Esta modalidad va en crecimiento, principalmente en parques, a través de metodologías cada vez más imaginativas para raptar a nuestros animales de compañía.
¿Por qué lo hacen? se han identificado principalmente tres razones: la primera para utilizar los animales “de raza” que se encuentran sin esterilizar en criaderos ilegales; la segunda para revenderlos en algún local comercial o por medio de redes sociales; la tercera para extorsionar a los tenedores exigiendo pago de rescate.
Recomendaciones: adoptar y no comprar para disminuir la demanda de animales de raza, esterilizar, mantenerlos siempre con collar y correa, además de nunca perderlos de vista.
Se puede recurrir también a placas de identificación, elementos de rastreo y microchips implantados (con la información actualizada en “Ciudadano de 4 patas”), todas acciones que permitirán identificar al animal y facilitar la devolución a su tenedor.
3. Extorsión por pérdida
Es increíble que algunas personas utilizan un momento de tanta vulnerabilidad como la pérdida de un animalito para estafar a sus tenedores: en IDPYBA hemos recibido múltiples casos en los que los ciudadanos, buscando a su animal, comparten su información personal y reciben llamadas de personas haciéndose pasar por un rescatista, policías o ciudadanía general, solicitando dinero para entregar el animal.
Recomendación: no dar información adicional del teléfono de contacto, solicitar prueba de la presencia del animal (fotos o videos, ojalá videollamadas) y agendar la entrega en un lugar seguro, idealmente un CAI o en un centro comercial concurrido.
Por favor no dar dirección de sus casas o la placa de su carro y no hacer transacciones previas a la entrega del animal.
4. Uso de imágenes de animales enfermos para pedir dinero
Dia a día aparecen nuevas personas que cuidan y apoyan los animales más vulnerables de Bogotá; esta labor que es maravillosa, necesaria y costosa, genera que ciudadanos de buen corazón realicen donaciones.
Sin embargo, hemos encontrado casos de solicitudes que faltan a la realidad, con exámenes que no son necesarios, gastos en medicinas que no corresponden y fundaciones o personas totalmente ficticias que toman imágenes de otros albergues y postean como si fueran propios, inventando historias terribles para recibir dinero sin necesidad.
Recomendación: realizar una verificación previa de la veracidad de la información, visitar las fundaciones que apoyamos, pedir evidencias del estado actual del animal al que se va a apoyar o centralizar el apoyo a través de entidades reconocidas como el IDPYBA, la Cruz Roja, Bomberos de Colombia y otros.
5. Uso de animales en calle para pedir dinero
Recuerda que algunas veces la ayuda que damos a las personas en las calles no necesariamente está destinada a proveer lo que ellos están necesitando. Esto no es diferente cuando se utilizan animales de compañía para obtener dinero. Así sucede con animales utilizados en las calles bogotanas, en Transmilenio, en plazas y al frente de tiendas con el fin de despertar empatía y conseguir una “limosna”.
Recomendación: Recuerda que a veces “tu ayuda no ayuda”; si la intención genuina es mejorar la situación de un animal o una persona en calle, lo mejor no es premiar este tipo de comportamiento con dinero; Integración Social y el IDPYBA cuentan con campañas como “Huellitas de la Calle” en donde se brindan brigadas médico veterinarias, donaciones de alimentos y seguimiento psicosocial para permitir una atención integral a estas comunidades.
6. Falsos prestadores de servicio
Para vivir en armonía con nuestros hermosos peludos debemos permitirles y permitirnos una vida cómoda y sana, con visitas periódicas al veterinario, paseadores, asistencia al colegio, grooming, adquisición de seguros y mucho más.
Pero no siempre este tipo de servicios son prestados por gente idónea con los conocimientos técnicos o profesionales necesarios, causando costos exagerados o fantasmas.
Recomendación: verificar tu prestador de servicios con las entidades competentes; comprobar que el veterinario tenga una tarjeta profesional - Consulta de tarjeta profesional.
El IDPYBA cuenta con un equipo de regulación que realiza visitas a los establecimientos que presten servicios para o con animales, por lo que puedes solicitar información sobre el establecimiento mediante un correo a
En el caso de otros servicios visita previamente el espacio, ve al colegio del perro, acompaña un día al paseador en la caminata, con lo cual puedes verificar e identificar de forma temprana posibles inconsistencias.
7. La falsa denuncia como cohesión
Una disputa de ascensor, una pelea de pareja o un malentendido en el trabajo puede llevar a acabar con el buen nombre o la vida de una persona instrumentalizando a los animales de compañía.
Se ha vuelto cada vez mas claro que si hay algo que INDIGNE a los bogotanos es el maltrato animal, pero esto lleva a que personas inescrupulosas utilicen esa fuerza social en contra de enemigos personales.
No imaginan la cantidad de veces que hemos atendido una denuncia de maltrato animal en donde al realizar la evaluación se comprueba que no existe ninguna evidencia de maltrato o mala tenencia y la historia obedece a cosas como “la verdad es que la vecina y yo estamos en guerra” o es qué desde que nos divorciamos me dijo que iba a hacerme la vida imposible”.
Lo triste es que tenemos casos en los cuales la denuncia era una farsa y la ciudadanía actuó sin conocimiento de la historia completa, rompiendo vidrios, vandalizado carros, robado animales y modificado vidas, todo por culpa de un post tendencioso.
Recomendación: no seas parte de la bola de nieve; cada denuncia de maltrato animal debe tomarse con mucha seriedad y son las autoridades competentes las que deben hacer la verificación de ellas.
La Policía Ambiental, los Bomberos de Colombia, la Fiscalía y el IDPYBA cuentan con equipos especializados que hacen la visita de verificación, evalúan las 5 libertades de cada animal y evalúan todos los pormenores del caso garantizando así el bienestar de los animales, salvaguardando y llevando ante Inspección de Policía o incluso Fiscalía, los casos en donde se pueda evidenciar el maltrato.
Esperamos que estas indicaciones nos sirvan para entender las formas en que algunos inescrupulosos pueden utilizar a nuestros animales de compañía para cometer ilícitos y convertirnos en víctimas, junto a nuestros amados animales.
Si tiene dudas sobre alguno de estos temas puede comunicarse con nosotros al teléfono (601) 647 7117.
Por: Laura Vivian Idrobo - Subdirectora de Atención a la Fauna